A pesar de la escasez de terrenos, la Corporación E. Wong seguirá apostando por los centros comerciales como estrategia de expansión tanto en Lima como en provincias, asegura Edgar Callo, gerente de Centros Comerciales de Corporación E. Wong.
—Trabajan en el ‘mall’ de Santa María, ¿qué marcas entrarían como anclas?
Ese proyecto depende de algunas gestiones relacionadas al saneamiento. Estimamos comenzar a construir en abril del próximo año para inaugurar la primera etapa en noviembre del 2017. En cuanto a las marcas, ya estamos poniéndole nombre a los planos, pero todavía lo mantendremos en reserva.
—Replicarán el éxito de Plaza Norte, pero con más diversión nocturna.
Eso queremos. Santa María tendrá el ‘hub’ de discotecas top de Lima. Hasta el momento tenemos tres mapeadas. También queremos tener restobares. Sin embargo, no dejaremos de lado el entretenimiento familiar con parques, juegos, cines y restaurantes.
—¿Puede adelantar qué discotecas operarán?
Dos de ellas operan entre Lima y Asia, y la tercera es nueva. También consideramos un gimnasio y una tienda de mejoramiento del hogar. Al estar sobre la Panamericana [Sur], este ‘mall’ será la atracción de los desarrollos inmobiliarios desde el km 30, pues cubrirá las necesidades ‘retail’ en el sur chico. El desarrollo natural de Lima será hacia el sur.
—¿Este centro comercial no se robará el público del Mall del Sur?
Apuntamos a los clientes potenciales de los grandes proyectos inmobiliarios que se desarrollarán en el sur en el corto plazo. Además, está la gente que ya habita la zona y que está desatendida.
—¿Tendrán suficiente demanda?
Según estándares internacionales, debe existir un centro comercial regional cuando la población supera las 500 mil o 600 mil personas. En el Perú esa regla casi no se da. Por ejemplo, en el Mall del Sur atendemos a una población de 2 millones y medio de habitantes.
—¿Y los problemas de abastecimiento de agua?
Ya se están solucionando para Punta Negra, San Bartolo y Punta Hermosa. Todas van a tener servicios. El saneamiento es una prioridad para el gobierno.
—La corporación apostará por grandes centros comerciales y no modelos de strip o power centers. ¿Por qué hacerlo si hay cada vez más escasez de terrenos?
Es cuestión de buscar, soluciones hay. Mall del Sur es un gran ejemplo.
—Ripley y H&M entrarán a Mall del Sur.
Así es, ambos comenzarán a operar en los próximos meses. Además, en el primer trimestre del próximo año abrirá Paris. También estamos en conversaciones con otras dos marcas ‘fast fashion’ que podrían entrar tanto a Plaza Norte como a Mall del Sur.
—Por otro lado, ¿ya tienen identificada la provincia en la que aterrizarán próximamente?
El tema está cerrado. Tenemos ya una locación en provincia, pero estamos ajustando detalles contractuales. Si todo va bien, comenzaríamos a fines del 2017 o a inicios del 2018.
Fuente: El Comercio
Un moderno mall es la principal apuesta económica que recibirá el tradicional balneario sureño.
A pesar de ser el más alejado de los cuatro balnearios tradicionales del sur chico, Santa María del Mar ha sabido capitalizar esa lejanía y además de concitar la atención de las inmobiliarias, también ha captado el interés de inversionistas vinculados al comercio.
Así, el moderno complejo comercial de Corporación EW –que desde hace varios años tiene 160.000 m2 de terreno comprometidos– por fin se convertiría en realidad y lo más probable es que esté listo para el 2016.
Según detalló la alcaldesa del distrito, Viviana Roda, el grupo Wong ya culminó la etapa de movimiento de tierra y el terreno ha quedado totalmente nivelado para que comience –dentro de poco– la construcción de una nueva apuesta comercial.
“Sabíamos que querían estar listos para este verano pero para ello debían de haber empezado a construir a inicios de setiembre y todavía tienen pendiente el tema de las licencias. Así que en el 2016 recién empezaría a funcionar”, afirmó.
Aunque los detalles de la inversión no son conocidos, se sabe que la construcción se haría en dos etapas, la primera con un supermercado, zona de restaurantes y discotecas.
Cabe indicar que la estrategia que se busca es satisfacer la demanda de los habitantes del sur chico, sobretodo en los balnearios del sur donde no existe ningún desarrollo comercial importante, el mismo que captaría a aquellos que viven en Lurín, Pachacámac, Punta hermosa, Punta negra, San Bartolo, Pucusana y Chilca.
Fuente: PerúRetail